Dos centros del CSIC en Andalucía, galardonados en la XXI edición de los premios Plaza de España

El Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC) y la Estación Experimental de Zonas Áridas (EEZA-CSIC) han sido dos de los nueve galardonados en la XXI edición de los Premios Plaza de España, organizados cada año por la Delegación del Gobierno de España en Andalucía.

El acto, celebrado esta mañana en la sede de la Fundación CajaSol en Sevilla, ha contado con la presencia de la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y del delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, quienes han presidido la ceremonia. En esta edición, los Premios Plaza de España han otorgado nueve reconocimientos entre personas, colectivos, instituciones y empresas que han destacado por su solidaridad, cooperación, justicia social y convivencia democrática, además de contribuir a promover la ‘marca España’ y los valores recogidos en la Constitución Española.

El Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC), con sede en Granada y que celebra este 2025 su 50 aniversario, se ha consolidado como un referente europeo en investigación espacial. El centro desarrolla estudios en todas las escalas del Universo: desde la atmósfera terrestre y los sistemas planetarios hasta galaxias, física solar y alta energía. Además, diseña y construye instrumentación avanzada que opera en misiones espaciales punteras en el ámbito internacional. Reconocido como Centro de Excelencia Severo Ochoa en dos convocatorias consecutivas, el IAA-CSIC también impulsa la divulgación científica y la participación ciudadana, posicionando a Andalucía en el mapa internacional de la investigación espacial.

Olga Muñoz, directora del IAA-CSIC, que ha recogido el galardón en nombre del centro, ha señalado que tanto en astrofísica como en la ciencia en general la forma de trabajar se alinea con los valores de la Constitución: colaboración, igualdad y respeto. “Formamos parte de consorcios internacionales y grandes equipos donde no importa la nacionalidad, el sexo o la religión. Remamos juntos hacia un objetivo común, fomentando un espíritu crítico y abordando las cuestiones desde diferentes perspectivas.”

Por su parte, la EEZA-CSIC, en Almería, es un centro de referencia internacional en el estudio de ecosistemas áridos y semiáridos. Con más de 75 años de andadura, sus investigaciones abarcan el estudio sobre desertificación, contaminación ambiental, intercambio gaseoso entre suelo-planta-atmósfera, la adaptación al estrés ambiental de la diversidad de organismos que lo pueblan (biocostras, flora y fauna), las interacciones que se establecen entre los organismos y el medio que habitan, los procesos evolutivos, las invasiones biológicas, y la conservación de la biodiversidad en estos ecosistemas extremos. Entre sus instalaciones destaca la Finca Experimental “La Hoya”, dedicada a la conservación de varias especies de fauna sahariana en peligro de extinción. Con más de siete décadas de trayectoria, la EEZA combina proyectos de investigación en ecología de zonas áridas, programas de conservación “in situ” y a través de reintroducciones de diversas especies amenazadas, así como la formación de jóvenes investigadores.

Teresa Abáigar y Cristina Armas, directora y vicedirectora de la EEZA, hasta el pasado mes de noviembre 2025, en representación de sus compañeros, han recibido el premio. “Este premio reconoce la larga trayectoria y compromiso de nuestro centro con la ciencia y la sociedad que la sustenta y que, finalmente, es destinataria del conocimiento que generan”, aseveran.

Durante el acto, María Jesús Montero, vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, ha manifestado que “este acto sirve para reconocer a instituciones que se guían por valores democráticos. Sus trayectorias reflejan calidad humana, empatía y generosidad, poniendo el talento al servicio de la sociedad”. Asimismo, ha añadido que “la ciencia y la cultura son ejemplo de ello, pilares fundamentales de cualquier sociedad civilizada. Queremos rendir homenaje a quienes dedican su vida a la investigación contra el cáncer y el cambio climático, así como a quienes nos invitan a soñar con las estrellas y el universo”.